Mientras esto sucedía los trabajadores continuaban instalando una barricada de alambre de púas para evitar que los migrantes intentaran hacer una entrada masiva. Otros observaban desde el mismo muro donde familias separadas por cuestiones migratorias se reúnen los fines de semana para poder tocarse las manos.
Un segundo joven brincó la cerca en medio del festejo jubiloso de sus compañeros que le gritaban que escribiera alguna consigna sobre la arena: “Perro: ponle a fuera Trump! Perro: fuera Trump! Perro… Ponéle a Fuera Trump… Perro: ponéle Fuera Trump, Fuera Trump, Fuera Trump… Ponéle Fuera Trump!“.
Igual que hicieron para cruzar, regresaron los dos migrantes a suelo mexicano, ante la mirada atenta de los guardias fronterizos. Desde la reja hubo quien les gritó “We are no afraid you”, “nosotros no te tenemos miedo”.